La isla vive al cien por cien de todos los que hemos pasado allí sus vacaciones año tras año. Los que no alquilan apartamentos, habitaciones o casas producen y venden todas las cosas que nos recuerdan en casa una época maravillosa en la isla. Mallorca vivió de esto y no solo de las rebajas en las conocidas zonas de fiesta.

De hecho, el Corona Lock Down ha estado sucediendo durante un año. Con un miedo tremendamente grande a la supervivencia de todos los mallorquines. Ya nada funciona y la cautelosa esperanza del regreso de los turistas se ha desvanecido por completo.

Cuando nuestra iniciativa comenzó en abril de 2020, no teníamos idea

cuán drásticamente cambiaría la situación en Mallorca.

Pero también vemos cómo el hormigón puede ayudar.

Con CADA botella de vino vendida   Con cada tarro de miel o los maravillosos productos de Ca na Mora , apoyas específicamente a los mallorquines

Pequeños productores y enólogos. Ayudar es muy fácil. ¡Solo hazlo!